lunes, 13 de junio de 2016

"¡NO SIENTO CARIÑO DE MIS NIETAS!"

Mendigo como soy,
también soy pobre en agradecimiento.
 
(William Shakespeare, escritor inglés, siglo XVI)


24 mayo 2008

102.- “¡¡NO SIENTO NINGÚN CARIÑO DE MIS NIETAS!!” …
(El amor dado y el amor no correspondido)

Algo extraño ha sucedido en esta noche, y pues solamente he tenido que levantarme 1 vez para ayudarla en el baño, el resto de la noche ha sido de silencio total, y es la primera noche en dos semanas que he podido descansar algo, y aunque no he dormido … Me he quedado gratamente sorprendido, ojalá fuera así cada noche, necesito dormir. Son muchos meses de estar pendiente de mi Madre del Alma, sin que los demás se preocupen por mí y ni les importe si tengo tiempo para mis cosas … Ninguno de los dos hijos de mi madre se ha ofrecido, ni se ha interesado, en hablar de nuevo para encontrar una forma de cuidarla.

Hoy es sábado, ni su hija ni sus nietas la han llamado desde hace unos días, hoy debería estar con ellas para que le ayuden en su baño y en sus cositas, también quiere ir a la peluquería y a comprar una falda, veremos cómo continúa el día, de momento todo es un remanso de silencio y de paz continuo. La inflamación de la zona temporoparietal está bajando lentamente, pero el gran problema en su oído izquierdo aún no está completamente resuelto, pues ayer todavía se ladeaba después de haber caminado un rato, aunque vuelve a equilibrarse después de un breve descanso. Esto me indica que su balanza interna está poniéndose en un punto equilibrado.

Eran las 10 h. de la mañana cuando la he acompañado a casa de su hija, donde ha estado todo el día, y aunque a las 17 h. ya me estaba llamando para ir a buscarla, al final he ido a las 19 h. Ha salido de allí con una cara muy larga, ninguna de ellas la ha acompañado hasta la calle y yo no he querido subir al piso, pero enseguida me he dado cuenta de que algo había pasado … Lo primero que me ha dicho mi madre, con mucha pena y al mismo tiempo con mucha rabia:“¡¡no siento ningún cariño de mis nietas!!”, … aunque tampoco sabe decirles nada pues se muerde la lengua. Después de un rato de estar muy callada me ha repetido lo mismo de otras veces: “¡me tratan como a un mueble, no salen a pasear conmigo, la nieta mayor siempre está con el novio y la pequeña siempre está en el ordenador!”

El problema es que ha soltado la lengua cuando estaba conmigo, pero contra mí, y lo cual le he permitido durante un rato, hasta que al final no me ha quedado otro remedio que hacerla callar y decirle: “mamá, ¡es a ellas a quienes debes soltar tu enfado y no a mí!” … Está sucediendo lo mismo que cuando yo era niño, cuando tenía algún enfado con mi padre lo pagaba conmigo, y ahora es el cabreo contra su hija y nietas, el que quiere pagar conmigo, y esto no se lo puedo permitir de nuevo, no me gusta repetir el Juego de la Oca ni jugar el Juego del Ajedrez.

Texto del libro "Tres hermanos y una madre" - Diario de un karma familiar (I) - El Juego del Escondite (la pérdida), inscrito en el Registro de la Propiedad Intelectual (España), y protegido por derechos de autor. DF. Nomemientas Gavilán.

Decía mi madre: "No hay mayor desprecio que no hacer aprecio" ...

Si quieres leer más contenido de este libro, puedes pinchar en el siguiente enlace y así encontrarás diferentes entradas: bienvenida y enlaces directos

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Si quieres leer un contraste impresionante: Para vergüenza de muchos hijos 
Si quieres leer la presentación y prólogo pincha aquí: Tres hermanos y una madre
Entrada destacada: La dependencia en la vejez



6 comentarios:

Una desencantada de la familia dijo...

Por desgracia sucede muy a menudo, mucha gente no sabe devolver lo que recibió en su momento. Yo pienso que la madre de estas nietas es la causante, ella es quien no ha enseñado a sus hijas lo que significa el respeto y el amor a los mayores. Qué pena de nietos, qué pena de muchos hijos y de mucha gente, solamente saber recibir, no saben devolver.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Pues te puedo decir, que en este caso se puede aplicar el refrán muy bien, de tal palo tal astilla. Lo digo con todo el dolor de mi alma, yo tuve que verlo y vivirlo y te puedo asegurar que no fue nada agradable, mas bien fue un dolor inmenso, al confirmar lo que yo ya estaba esperando. No es necesario ser vidente, hay cosas que son evidentes. Gracias por estar aquí y comentar. Un saludo.

Anónimo dijo...

Es muy triste que sucedan estas cosas, la gente mayor tiene miedo de decir lo que siente, tienen miedo de ser abandonados si lo dicen, se callan, se muerden la lengua, y soportan la desvergüenza de hijos, de nietos, de la familia en general, esto no lleva a ningún lugar, salvo a un deterioro mucho mayor, y todo por el miedo, y también porque su mente no puede asimilar que les hagan esto.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Así es, si para una mente adulta es difícil de asimilar, mucho más difícil lo es para una mente vieja, quien no lo ha vivivo nunca puede comprenderlo. Gracias por tu comentario, ya veo que tú lo puedes comprender muy bien.

Mirando al mar dijo...

Soñé que los nietos amaban a sus abuelos, soñé que les abrazaban, soñé que les agradecían el tiempo pasado con ellos y todo lo que les enseñaron, hasta que mire a tierra y me di cuenta de que no siempre es así en la mayor parte de la sociedad en la cual vivimos. Qué pena sentí al dejar de mirar el mar. Yo puedo comprender muy bien a esta abuela.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Y yo también puedo comprenderla muy bien a usted, pero por desgracias los sueños, sueños son, sin embargo nos sirven también para apaciguar el dolor que sentimos. Gracias por estar aquí.