Cotilleos del Nido de las Águilas de Madina Mayurqa
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Pues sí, nos recuerda una canción de D. Javier Gurruchaga y la Orquesta Mondragón, que decía: "Viaje con nosotros si quiere gozar. Viaje con nosotros a mil y un lugar, y disfrute de todo al pasar, y disfrute, de las alegres historias que les vamos a contar" ... Estábamos en el año 1980 y ahora estamos en año 2022, han pasado ya 42 años, y qué cosas, es justamente la mitad del ciclo de Urano, del cual tanto llevo escrito últimamente, una canción que muchísima gente recordará, la gente de antes, no la de ahora ... Pero no es de esto de lo que yo quiero escribir, sino de "Viaje al centro de la tele", un programa de TVE1, que anoche sobre las 22 horas y durante dos horas pude ver tumbado en mi maravilloso sofá.
VIAJE al CENTRO de la TELE ... y de LA VIDA
Yo imagino que anoche, un martes día 13 de diciembre 2022, muchos españoles estuvieron viendo la tele y en concreto el programa del cual escribo, otros no, lógicamente cada cual vio lo que quiso ver, pero yo pondría la mano en el fuego, de que la grandísima mayoría que lo vio fue gente de entre 50 y 70 años, más o menos, yo dudo mucho de que lo vieran los jóvenes y los niños. Se trata de un programa, que por lo que tengo visto últimamente, lo pasan los martes de cada semana y sobre la misma hora, y anoche pues estuvo dedicado básicamente a ABBA, Mecano y Miguel Bosé, con sus canciones de antes, de la década de los años 1980 y 1990 principalmente, de la música que la gente de entonces escuchaba, calculo yo, entre sus 20 y 40 años de edad, más o menos por ahí.
Y yo creo que todos estaremos de acuerdo, en que la música que escuchábamos, y bailábamos también en nuestros tiempos de juventud, nos dejó a todos un cierto recuerdo, un recuerdo emocional del pasado, de los tiempos en los cuales todo parecía ser maravilloso y nosotros también lo éramos, de los tiempos en los cuales vivíamos la vida más alegremente, pero inconscientes éramos de lo que nos vendría en el futuro ... Y ahora sucede algo parecido, con la gente joven, que se lo pasan en grande en las discotecas y en los botellones, nosotros lo hacíamos en los guateques caseros, y que parece que son muy felices con la música actual, pero quienes tampoco saben lo que su vida será en el futuro, y mucho menos saben lo que a nivel emocional podrán sentir, el precio emocional que deberán pagar, dentro de 30 ó 40 años, e igual que no saben o no quieren saber que la vida es un camino de ida y de vuelta.
Yo lo digo siempre, la vida es un camino de ida y de vuelta, y tarde o temprano regresamos atrás, tarde o temprano regresamos al pasado, para olerlo, para escucharlo, para recordarlo, para saborearlo, también para añorarlo, y para tomar consciencia de él, puesto que la mayoría teníamos la consciencia dormida, no nos dábamos cuenta de nada, vivíamos la vida sin saber de qué iba, sin saber nada de nada ... Después nos llegó el futuro y todos cambiamos más o menos nuestra personalidad, ya dejamos de escuchar la música de antes y cada cual hizo de su vida lo que mejor supo o lo que mejor pudo, y no digo lo que mejor quiso porque no suele ser así ... Más adelante, cuando ya estás en los 50, 60, 70 y más años, un día escuchas algunas canciones que escuchaste en tu infancia o tu juventud, y entonces el pasado se hace presente, en este eterno tiempo presente continuo.
La experiencia y vivencia práctica del viaje
Y esto sucedió ayer noche, para quienes estuvieron viendo el programa de "Viaje al Centro de la Tele", y "de la vida", como ya también añado, porque realmente esto fue así, fue un viaje al interior y al centro de uno mismo, un corto viaje emocional a un lejano pasado (Saturno), una regresión emocional (Luna), y su consecuente reacción y regresión de homotoxicosis (Urano), en el cuerpo físico, y más en concreto en el sistema nervioso central y en el sistema ósteo-muscular, ¡no bronquiolitis! (es otra historia), en las zonas del cuerpo físico de cada uno de los "regresados", que se correspondan con las casas de su carta astral de nacimiento, donde tenga ubicados los signos de Leo, Acuario y Tauro, y las cuales por la correspondiente gradaciòn se vieron afectadas anoche, que nos trajo recuerdos de tiempos que ya nunca volverán, y que nos hizo aflorar a la mente consciente, lo que el inconsciente Luna guardaba, en espera de que llegara su tiempo de aflorar, "la sombra" que quedó pendiente de integrar en la consciencia individual de cada uno, al haberse perdido en su Juego del Escondite.
Un viaje que pudimos disfrutar, como dice la Orquesta Mondragón, viendo y escuchando a quienes en su tiempo nos endulzaron un poco la vida, pero que al mismo tiempo también hizo aflorar recuerdos de todos los sabores y olores, dulces, amargos, agrios, ácidos, salados, picantes y alguno más ... Un par de horas de cierta añoranza y de melancolía para muchos, con las cuales se habrán despertado en la mañana de hoy, con esa especie de resaca o secuela, de quienes sin darse cuenta estaban haciendo una regresión emocional al pasado, un viaje al pasado interior, un viaje al centro de sí mismos, pues de eso se trata, de regresar al centro, tras haber estado parte de la vida perdidos en la periferia del círculo, y no en el centro del círculo, ... y claro, la Vida nos dio esta oportunidad, para quien quiso aprovecharla, de liberar (Urano) el pasado (Saturno), a través del plano emocional (Luna), para así poder cruzar, en este eterno tiempo presente continuo, el puente que nos une al plano espiritual y que nos acerca al dios desconocido que todos guardamos adentro.
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| El Puente y el Túnel del Tiempo, en Madina Mayurqa |
Así funcionamos sin que seamos conscientes de ello, pero, lo más curioso, al menos para mí, es lo que anoche, antes de tumbarme a ver la tele y zapear por todos los canales, yo estuve escribiendo y sin saber, que después a las 22 horas se cumpliría aún más lo que escrito estaba en las estrellas, en este guion del Teatro de la Vida, que todos nos vemos obligados a vivir ... Preguntas para mí no las hay, demasiado bien entiendo estas vivencias, mías y de los demás, muchas he vivido y ya no me espantan, pero siempre sigue quedando "esa cosa", de conocer el libreto de la Obra, y de que la Mano Invisible, de vez en cuando, le dé al botoncito del mando a distancia, para que, justamente, coincidentemente, casualmente, y sobre todo causalmente, en algunas ocasiones sintonice un canal específico y apropiado, para el momento que le corresponde, a cada uno de los actores salir al escenario del Teatro.
Quien lea esto es muy probable que no lo pueda comprender, y yo lo entiendo bien, que no lo puedan comprender, pues todo depende, siempre depende del nivel de vibración, de evolución y de consciencia de cada cual ... Hay que entender que el inconsciente de cada uno, quiere hacerse consciente, y por esto busca el medio, como es que nuestra vibración interior sintonice determinado canal de televisión, o busque alguna situación o persona concreta en el exterior, lo cual se traduce también por esa Mano Invisible, como yo la llamo ... Hay muchísima gente que vive su vida sin saber de qué va, de dónde viene y a dónde va, y bueno, es su libre albedrío, vivir su vida de manera inconsciente, dentro del fatum o destino predeterminado, que nos hemos fijado antes de nacer, pero eso sí, hay un tiempo para cada cosa y una cosa para cada tiempo, hay un tiempo para la inconsciencia y hay un tiempo para la consciencia (para la consciencia de "la sombra").
Me queda agradecer a ABBA, a Mecano y a Miguel Bosé, a quienes pude ver cantando en muchas de sus actuaciones durante los años 1980 a 2000 aproximados, quienes durante dos horas me trajeron recuerdos, de aquellos tiempos que ya nunca volverán. Dicen que nunca tiempos pasados fueron mejores, pero yo lo pongo en duda, hay tiempos presentes que son peores, existen ambos al mismo tiempo, tanto en el pasado como en el presente, hay un tiempo para cada cosa y una cosa para cada tiempo.
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Y esto es parte de lo que yo escribí anoche, fue premonitorio, sin saber que después vería el programa de "Viaje al centro de la tele", en la entrada titulada: Si puedes, que tal vez tú no puedes:
