miércoles, 8 de abril de 2020

EL LAZARETO DE LAS CUARENTENAS

Buenas noches o bona nit, tengamos todos,
os lo desea el Abad Pelotines del Copón,
desde el Convento de las Águilas de Madina Mayurqa.


Ahora no hablaremos del virus coronado Covid-19, ya está bien de siempre lo mismo y desde ya un mogollón de días, ya son 3 meses y estamos todos hasta las narices, pero y sobre todo, lo estamos de esta dichosa clausura monacal y cuarentena obligadas, y de modo que hoy hemos salido de excursión, y sí, hemos salido los frailes pelotines a bordo de nuestras águilas, por algo estamos en el Convento de las Águilas, y hemos salido todos de excursión a nuestra vecina isla de Menorca, situada al noreste de Mallorca, en estas Islas Baleares, encantadas y desencantadas, por tanta afluencia turística como ha habido en los últimos años y precisamente por esto, por demasiada afluencia y aglomeración de gente por cualquier lugar.

A partir de ahora ya no será lo mismo, esto lo sabemos muy bien. Dicen los periódicos y hemos visto fotografías de diferentes lugares, que ya no reconoceremos cuando salgamos a la calle, nosotros, los apestados, porque eso somos, apestados o con sospecha de estarlo, pues resulta que ahora los delfines se pasean a sus anchas y a pocos metros de las playas, los patos se pasean por el centro de Palma, el puerto y el mar que circunda las islas está muchísimo más limpio que nunca, el aire también, ahora se ven más estrellas en la noche, se respira mucho mejor, ya no se siente aquella sensación de tufillo de origen desconocido, el aire está más claro y se divisa mucho mejor en la distancia, pero bueno, no es de esto de lo que queríamos hablar, queríamos hablar del Lazareto de las Cuarentenas.

El Lazareto de las Cuarentenas de la bahía de Mahón (Isla de Menorca)

El Lazareto de Mahón (Menorca/Islas Baleares) - De MontanNito - Trabajo propio, CC BY-SA 2.5,

La cuestión es que hemos aterrizado en la isla de Menorca, volando a lomos de nuestras águilas, pero no exactamente en tal isla, sino en la Isla del Lazareto, llamada también la Isla de la Cuarentena, una pequeña isla situada en medio de la bahía de Mahón, un lugar impresionante y magnifico, y tal vez el puerto mejor protegido del mar Mediterráneo, debido a su forma y a su profundidad, y un lugar que al Abad Pelotines le encanta por muchísimas razones, un lugar donde ya ha estado en varias ocasiones y donde ahora hemos ido todos de excursión, e incluida la hermanita Blancanieves y los 7 encantadores Enanitos ... Una isla de Menorca, bastante desconocida para la grandísima mayoría de peninsulares, y también bastante desconocida para el resto de balearicos, no hay allí tanta aglomeración de turistas como en las otras islas, y es el mejor lugar para sentirse encantado y no desencantado, de estas islas del Mare Nostrum.

No hablaremos más sobre la excursión a lomos de nuestras águilas, no sea que los controladores de la clausura y cuarentena nos metan a todos en la cárcel, por violar el confinamiento, solo queríamos ir a visitar el lazareto, de la Isla del Lazareto, o Illa del Llatzeret, una isla donde se construyó una enorme fortificación, en el siglo XIX, que debía servir como lugar de cuarentena, para los tripulantes y para los pasajeros de los barcos, que entraban en el puerto de Mahón. Un lugar de verdad impresionante, que asusta incluso, cuando estás en el interior y ves las altísimas tapias de piedra gorda y de hasta 7 metros de altura, para bien protegerlo y que nadie saliera de allí. Un lugar que sobrecoge muchísimo cuando se visita, y que no por eso se debe dejar de visitar, para quien quiera y pueda, y cuando se pueda hacer, porque ahora es imposible con esta peste y cuarentena del siglo XXI, que vivimos todos confinados en nuestros hospitales, en nuestras casas y conventos respectivos.

Dejaremos aquí un enlacito a la página del Lazareto de Mahón, por si te apetece echarle un vistazo y comprender mejor cómo se hacia en otros tiempos pasados, igual que también se hacía en esta isla de Mallorca, en un lugar situado en el actual Paseo Marítimo, que antes era un roquedal sobre el mar y que ya ha desaparecido, tan solo se conservan sus dos arcos de entrada, y actualmente es un parque, el llamado Parque de la Cuarentena ... Tristes lugares debieron ser, para estar recluidos entre paredes de altura que impedían salir, y una extraña sensación se siente cuando estás allí, en el interior del lazareto de Mahón, muy bien conservado por cierto y, no es como ahora, que por lo menos nos dejan salir al supermercado y a comprar tabaco al estanco, y además de salir a pasear el perrito.

Aquí esta el enlace: http://lazaretodemahon.es/, que lo disfrutes si haces una excursión virtual, pero mucho más lo disfrutarás y lo sentirás en las entrañas, si vas a nuestra isla de Menorca, la maravillosa y natural isla de Menorca, con sus calas vírgenes, con sus caminos de acá para allá, con el Camino de Caballos, o Camí de Cavalls, que rodea la isla entera y el cual se puede hacer muy bien a pie, es para excursionistas avezados, para quienes les gusta disfrutar de la Naturaleza y de la paz que ahora no tenemos ... Lo recomendamos bien los frailes pelotines de este Convento de las Águilas, y no olvides visitar también la Isla del Rey, aquí está el enlace a su página: http://www.islahospitalmenorca.org/ , también en la misma bahía de Mahón, donde se encuentra un hospital del siglo XVIII, y tal y cual siempre fue, como si el tiempo no hubiera pasado nunca, como si regresáramos a 200 años atrás, e igual que le sucede al lazareto de la Isla de la Cuarentena.

Un viaje en vídeo por el lazareto de Mahón
(si pinchas el cuadradito de abajo a la derecha podrás verlo a pantalla completa)

Y nada más, feliz viaje si vas, nosotros iremos en cuanto acabe la locura coronada, por la estupidez humana, visitaremos otra vez el lazareto, en una de las barquitas que salen desde el puerto de Mahón, y nos beberemos un buen "gin xorriguer", para celebrar el final, o por lo menos de la primera parte, de la cuarentena obligada, a los apestados por el coronavirus de los huevos. Saluditos tengamos todos, en la paz que buscamos y que tendremos otra vez, ojalá sea así y esto quisiéramos todos. Amén.

Cotilleo anterior: El Confesionario de parecer ser