A MI AÑORADO CASTILLO DEL REY

Hoy es domingo y se supone que no debemos trabajar, bueno, esto sucedía antes, ahora todos hacen lo que les da la gana, y yo también voy a hacerlo. No voy a escribir nada trascendental, voy a escribir algo sobre mi amado y añorado Castillo del Rey, situado en el bucólico y hermoso valle de Ternelles, en el municipio de Pollensa ... Se trata de un lugar de mi amada Sierra de Tramontana, en el norte de la isla de Mallorca, y lindando con las azules aguas del mar Mediterráneo. Es una regresión al pasado que ya nunca más volverá, o tal vez pueda regresar algún día, nunca se sabe.

Foto de archivo del diario Última Hora

Noticia en el periódico Última Hora: https://ultimahora.es/noticias/part-forana/2018/01/28/323467/ternelles-echa-cierre-solo-permitira-acceder-finca-guia.html

A MI AÑORADO CASTILLO DEL REY

(fue uno de los castillos del Rey y del Príncipe León)

Dicen, que tiempos pasados nunca fueron mejores (yo no estoy de acuerdo)
Muchas veces y en muchas cosas, tiempos pasados fueron mejores
Un conflicto entre autoridades (autoridades y rebeldes al mismo tiempo) 

La libertad absoluta no existe, siempre está condicionada por la autoridad de otros
Un conflicto en los eclipses entre Leo y Acuario 2018

Hoy ha amanecido muy nublado, son nubes muy negras que presagian lluvia, y ha llovido un poquito durante la noche, apenas para mojar los árboles y limpiarles sus hojas, que ya lo necesitan después de tanto tiempo que no llueve, y hablo ahora de la ciudad ya que en el norte de la isla ha llovido bastante más en el día de ayer ... Hace varios días que se anunciaba una lluvia gorda, de estas gotas frías que a veces nos caen encima en el mar Mediterráneo, aunque son más normales a finales de verano que no en pleno invierno, pero así está la Naturaleza, bastante caótica, igual que nosotros, y por esto estamos en alerta meteorológica. Yo no sé muy bien de qué color, tal vez fucsia, y hoy no es día de salir muy lejos, por si acaso, aunque ya estoy muy acostumbrado a que los hombres del tiempo se equivoquen a veces, es como con los astrólogos, no siempre se cumplen sus vaticinios.

Mientras leía los periódicos en esta mañana me he encontrado con una noticia del diario Última Hora, cuyo enlace dejo más arriba para quien le pueda interesar, y se trata de mi añorado Castillo del Rey, y digo añorado porque cada vez es más imposible ir allí, y ya no solo subir a las ruinas del castillo, sino entrar en ese bucólico valle de Ternelles, y digo bucólico y pastoril, porque es un término que usaba mucho la persona que escribió "Rutas Escondidas de Mallorca" ... Esto sucedía hace ya unos 45 ó 50 años, ha llovido mucho desde entonces pero aquello sigue estando igual, tan bucólico y pastoril, pues los propietarios del lugar lo conservan bien, es una familia de banqueros originarios de esta isla, cuyo nombre no menciono pero que todos conocemos, y que están poniendo multitud de trabas para que la gente no vaya por allí, y a lo cual tienen un cierto derecho, pero la verdad es que el camino que sale, desde el pueblo de Pollensa, tiene servidumbre de paso y acaba en el mar, y no existe otro camino para entrar allí.

Yo no voy a opinar sobre los litigios que hay entre la propiedad, los ecologistas, los excursionistas, el Ayuntamiento de Pollensa, Medio Ambiente y tribunales de Justicia, que son muchos y se arrastran desde hace años, y ya que cada uno se sitúa en su lugar y no se ponen de acuerdo para que pueda ser visitado el lugar, con cierta facilidad. Con la excusa de que se trata de una propiedad privada, y con la excusa de que allí anidan buitres, que están protegidos por Ley, pues no nos dejan pasear por allí, y ni tan siquiera por el camino que tiene servidumbre de paso, para los caminantes, y que acaba en el mar, en una cala que antiguamente se utilizó para el contrabando, y donde en una ocasión y hace bastantes años, yo encontré un montón de cartones de tabaco rubio, mojados por el agua del mar, y cuya marca no menciono pero que aún recuerdo.

En mis años veinteañeros no existía ninguna prohibición de paso y no existían litigios de ningún tipo, allí pasaba quien quería hacerlo, y no solo caminando sino también en vehículo todo-terreno, no era fácil hacerlo en coche normal, y debido a que se trata de un camino de tierra y piedras, y por esto lo indicado era un todo-terreno, que muy poca gente tenía y por lo cual no se veían circular por allí. Yo tuve la oportunidad de hacerlo en al menos 3 ó 4 ocasiones, conduciendo un Land-Rover y un Suzuki que me prestó mi querido jefe, del lugar donde yo trabajaba antes y donde habían varios que usaba la empresa. Fue uno de los lugares donde hicimos nuestros "safari" y tuve mucha suerte de esto, porque la grandísima mayoría de gente nunca lo ha podido hacer, y mucho menos lo podrá hacer ahora, y lo cual también es positivo, porque ahora muchos tienen todo-terrenos y además hay muchos guarros, que no saben lo que significa la palabra respeto, ni hacia los demás ni hacia la Naturaleza.

Castillo del Rey o Castell del Rei (foto de Diario de Mallorca)

La verdad es que estuve allí en muchas ocasiones, con mis amigos del grupo excursionista de aquel tiempo, fue un tiempo pasado que nunca más volverá, así es, dicen que nunca tiempos pasados fueron mejores, pero en este caso sí que lo fueron, y fueron mucho mejores que los actuales, ahora tan solo me quedan las fotos que entonces tomábamos con una camarita pequeña, pues por supuesto no habían digitales ni teléfonos móviles como hay en los tiempos actuales. Y allí nos íbamos algunos domingos de primavera, otoño e invierno, desde Palma salíamos a primera hora, incluso antes del amanecer, ya que el día se hacía corto al oscurecer temprano, para aprovechar el día completo y haciendo nuestras locuras por allí. Eso sí, siempre fue respetando todo el entorno y el lugar, y no dejábamos basuras ni restos que delataran nuestra presencia, la cual por supuesto no estaba prohibida sino todo lo contrario, era bienvenida, además del piscolabis que nos tomábamos para celebrarlo, en el pueblo, en Pollensa.

Eran unos tiempos que ya nunca más volverán, entonces los excursionistas y montañeros eran pocos, en una isla con menos población que la actual, entonces la gente se conocía entre sí, todo era mucho más familiar, y no como ahora en que te encuentras con cientos de personas extranjeras que también, en grupos organizados y con beneficio económico para los guías, deambulan y en fila india por los antiguos caminos de la Sierra de Tramontana. Ahora ya no son tan bienvenidos como antes, ahora los payeses de la montaña no les invitan a un trago de vino y a comer algo, tal y como antes sucedía con nosotros, ahora están cansados de ver tanta gente por sus tierras, aunque sean caminos públicos o con servidumbre de paso. Antiguamente, eran tan pocos los individuos que se aventuraban a caminar por allí, y los payeses, tal vez aburridos estaban de no ver a nadie, que en cuanto veían a alguien siempre los saludaban y se paraban a hacer una charlita con ellos, yo lo he visto y lo he vivido, incluso en más de una ocasión nos enseñaban su casa, tanto la casa del señor como la casa del mayoral.

La conquista del Paraíso - Vangelis

(por si te apetece leer con musiquita)

Nosotros nos encontrábamos por la mañana en la Plaza de España, en el bar Cristal, que en este año pasado se cerró y ya no existe, y donde previamente yo había aparcado mi coche, en la misma plaza y no como ahora en que es imposible hacerlo, salvo si usas el aparcamiento subterráneo ... Y desde allí nos íbamos en 2 ó 3 coches hacia Pollensa, eran unos 60 kms. de carretera para ir y otros tantos para regresar, no era autopista como tenemos ahora, y después de dejar aparcado el coche, junto al Puente Romano, con nuestras botas y mochilas siempre cargadas de lo más inimaginable, y hacia allí que nos dirigíamos, hacia el valle de Ternelles, mientras que alguno ya estaba pensando en a quién le cargaría al regreso su mochila con piedras ... Aún tengo en la memoria las mochilas, con nuestros bocadillos o con nuestra comida para calentar, en algún lugar donde hacíamos un buen fuego, en un tiempo en que no habían prohibiciones para ello, y no era como ahora que ni siquiera puedes fumar, y porque si ven humo te mandan una avioneta y te descargan el agua encima.

Después de entrar al valle, por un angosto paso entre altas montañas, que solamente deja espacio para el camino de carro y para el torrente que desde allí baja, todos ya marchábamos con cierta alegría y raudos para subir hasta las ruinas del Castillo del Rey, las ruinas de un castillo roquero que los moros construyeron, o que se piensa que lo pudieron construir los romanos, y aprovechando el gran paredón que allí existía. Un castillo que se comunicaba con el Castillo de Alaró, con el Castillo de Santueri en Felanitx, con el Palacio Real de la Almudaina en Palma, y con todas las torres o atalayas que bordean la costa mallorquina, las cuales antiguamente se utilizaban para vigilar posibles incursiones por mar, de piratas o de quien fuera, y desde donde con señales de humo se comunicaban entre sí, de manera que al poco tiempo toda la isla sabía lo que estaba sucediendo en algún punto, esto era el Internet de aquellos tiempos, hace algo más de 1.000 años.

No sé muy bien por qué nos llamaba tanto aquel lugar, la verdad es que era y sigue siendo uno de los más hermosos y salvajes que tenemos, sin edificaciones ni residencias modernas en absoluto, y salvo las antiguas casas de labranza de la posesión, casitas de aperos, y también una ermita que ya no se usa como tal, pero ya sabemos que los ermitaños siempre buscaban los lugares más bellos, para encontrar su belleza interior ... Nosotros en aquellos tiempos no buscábamos nuestra belleza interior, la verdad sea dicha, yo pienso que buscábamos sentirnos reyes, reinas, príncipes y princesas, al instalarnos allí y contemplar desde arriba unos dominios y una belleza de paisaje indescriptible, con vistas a una gran parte de la isla y sobre todo a la península de Formentor, y recuerdo aún, que también, si el día estaba claro y lo permitía, buscábamos la silueta de la Península Ibérica sobre el horizonte del mar.

Autor de la foto: Albireo386 - https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Castell_del_Rei_2.jpg

Después en una fuente de más abajo hacíamos la merendola, y si el ánimo estaba bien, sobre todo por las chicas, que siempre eran las más remolonas para subir y bajar, pues nos llegábamos hasta la cala, para mojarnos los pies nada más, y después ya comenzar el camino de regreso, hacia donde teníamos aparcados los coches y después a casa, donde ya llegábamos anochecido, muy cansados después de haber caminado y hecho el mono durante todo el día, desde el amanecer hasta el anochecer ... Eso sí, ningún problema para transitar por alli, en pocas ocasiones nos encontrábamos con alguien, yo creo que fuimos de los primeros grupos montañeros que existieron en esta isla, y de los que hablaban en castellano o mallorquín, y no como ahora que hablan multitud de idiomas diferentes. Y así es la vida, no se puede tener todo, pues si no tuviéramos tantos turistas, ahora seguiríamos paseando por allí, sin prohibiciones de paso y sin la necesidad de pedir permisos, que de cualquier forma ya no te los dan.

Bienvenidos al mundo moderno, bienvenidos al mundo real, o malvenidos, yo soy de los que piensan, que a menudo tiempos pasados fueron mejores ... La última vez que estuve allí fue hace pocos años, y tuve que pedir permiso, lo hice de forma legal, porque ilegales también las hay, pero es que es muy difícil entrar por otro lugar, debido a la escarpada orografía de las montañas que rodean el valle, y a la enorme dificultad de atravesarlas. Yo tuve que pedir un permiso en el Ayuntamiento de Pollensa, era quien entonces los daba de acuerdo a una sentencia de los tribunales, pero tan solo daba 20 licencias por día, y podíamos olvidarnos por supuesto de los fines de semana, los cuales ya estaban reservados con mucha antelación.

Ahora todo ha empeorado mucho más, te limitan el horario desde las 9,30 h. hasta las 15 h., y los días de visita que serán de miércoles a domingo, y esto me parece muy mal, por supuesto exclusivamente será para caminantes, y esto último me parece muy bien, pero además te limitan la libertad, debido a la autoridad de la propiedad, y esto no me gusta, pues ahora está condicionada por ir acompañados de un educador ambiental, de una fundación ecologista, de individuos que no habían nacido cuando yo ya pateaba por aquel lugar, y quienes no habían nacido, cuando yo fui ecologista y naturista antes que ellos, ¿qué me pueden enseñar?, ... no mucho a mis años, ¿o acaso me educarán en la vida sexual del buitre?... Yo creo que les puedo enseñar y educar mucho más y mejor, y me pregunto: ¿habremos de pedir permiso al educador ambiental, para hacer pis en el monte? ...

Y así que continuarán los conflictos y los litigios, pues yo no creo que el Ayuntamiento esté muy de acuerdo con esto, igual que los montañeros y excursionistas no lo están, y máxime teniendo en cuenta que se ha hecho en tiempo eclipsar, pero claro, es un eclipse de Luna en Leo, el signo de la autoridad, el signo que representa la autoridad de la propiedad, el signo del Rey León, el signo del Castillo del Rey, y por tanto ahora habrá que esperar a ver qué sucede en los próximos días, y a ver qué sucederá dentro de 6 meses lunares, en una nueva inversión de polaridades, entre los signos de Leo (autoridad) y Acuario (rebeldía), igual que ahora pero al revés, ... pero y al mismo tiempo, entre dos autoridades que también son rebeldes.

Muchas veces y en muchas cosas, tiempos pasados fueron mejores.

Reservados los derechos de autor: D.F. Nomemientas Gavilán.

Puede interesarte: El mes de los Santos Rebeldes - La depresión de S'Espalmador - Hasta el faro del fin del mundo