viernes, 22 de octubre de 2021

La Noche OSCURA del ALMA/ESPÍRITU

De tres maneras podemos aprender:
en primer lugar por la reflexión, que es la más noble;
en segundo lugar por imitación, que es más fácil;
y en tercer lugar por la experiencia, que es la más amarga.

Confucio (China - siglo V antes de Cristo)

LA PAZ COMIENZA EN EL ALMA

 LA NOCHE OSCURA DEL ALMA/ESPÍRITU
(todo comienza siempre por uno mismo)
(si no estás en paz contigo, no podrás estar en paz con el mundo)

" La noche oscura del alma ". Bert Hellinger (creador de las constelaciones familiares).

“Quiero deciros algo sobre la noche oscura del alma. Es un concepto de una tradición mística europea, muy cercana al pensamiento asiático. Esa noche oscura significa que me abstengo de buscar, me abstengo de toda curiosidad. ¿Y cuál es su efecto? La paz, para todo lo que me preocupa. Estoy en paz. No llevo (no cargo) más problemas ajenos. Los demás ya no llevan (no cargan) mis problemas. No interfiero de ninguna manera en los movimientos del alma. Nos respetamos mutuamente. Si cediera de nuevo a la curiosidad, le faltaría al respeto a mi alma. Se daría cuenta de que no la respeto. Es pues un buen método. No hay método, no hago nada, y al no hacer nada, hago mucho.(...)

También observé que cuando la gente toma un camino espiritual y se vuelven esotéricos, suelen rechazar seguir ocupándose de sus propios hijos o abandonan a su cónyuge. Rechazan hacer frente a su realización humana común así como a las responsabilidades que cuestan algo. Se elevan hacia un nivel pretendidamente espiritual. Son egocéntricos. Pueden hablar de perder el ego, y ¿sobre qué meditan? Sobre su ego, por supuesto. Y ¿Qué hay de sus deseos de ser iluminados? ¿Cuál es su meta al desearlo? Su ego por supuesto. Hay un gran engaño en todo ello.

Sin embargo hay otro camino espiritual: la noche oscura del alma. En España, San Juan de la Cruz habló de ello. Es un entrenamiento espiritual, y requiere tiempo. No puedes entrenarte a ello ni quererlo. Te cae encima. La noche oscura te cae encima. Una vez que estás en ella, ya no sabes a dónde ir. Todo está oscuro, estás en la desolación, sin dirección. Pero eres (estás) bastante fuerte para mantenerte en pie. Y al cabo de un tiempo, experimentas la noche oscura del alma.

La noche oscura del alma tiene tres partes:

Primero es la oscuridad de los sentidos, en la que ya no buscas lo que gusta a los ojos o a los oídos ni a ningún otro sentido. No es porque los desprecias de algún modo como podría ocurrir en otro nivel. No, es porque estás conectado con algo más profundo, con un lugar lleno de calma, de silencio. En este nivel ya no necesitas mirar afuera ni escuchar nada de fuera. Es un lugar muy vasto. En otras palabras, el camino espiritual requiere una purificación, especialmente una purificación de toda intención, de alcanzar una “meta superior”. Nos quedamos abajo, atrás, en el último lugar, todo el tiempo.

La segunda parte de la noche es muy difícil. Es la noche de la mente. Eso significa que abandonas tu deseo de saber. Ya no preguntas ¿por qué?, ¿Qué es?, ¿Qué ocurrirá después?. No, permaneces alejado de esa necesidad de saber.

Hay otra etapa más: la noche oscura de la voluntad. Ya no puedes realizar nada. Si tienes un proyecto, por ejemplo quieres aprender las constelaciones familiares y asistes a muchos talleres. Puede que sea bueno. Pero si tienes el proyecto de cambiar el mundo con ello, te has cortado de la fuente de la realidad. Si abandonas esos grandes proyectos – si no quieres curar a los demás ni mejorar al mundo, si sólo quieres quedarte contigo mismo – entonces se te abre otro camino. Puedes tener el impulso de dar sólo un pasito muy pequeño, y al seguir este impulso descubres mucho más que con ningún otro proyecto en el mundo. De repente estás en contacto con algo distinto, conectas con algo mayor.” 

Bert Hellinger en la Universidad de Forham, Boston 
Octubre 2004
La paz comienza en el alma: conflicto étnico y reconciliación”

Traducción Brigitte Champetier 

 LA NOCHE OSCURA DEL ALMA/ESPÍRITU

Buonanotte, gracias por esto, conozco las constelaciones familiares de Bert Hellinger, yo también he participado una vez, pero claro, como sucede siempre, no es suficiente ... Cuando llegan las noches oscuras, oscurísimas o negras del alma, no hay loco que no acabe volviéndose cuerdo, sí, si se deja, que no todos se dejan, pensando que te vuelves loco, pero no, no es así, porque ya estamos todos locos, viviendo como vivimos en este mundo irreal, ilusorio y engañoso, donde nada es lo que parece y todo es lo que no parece ser, irreal por dual, igual que todos somos, duales, bipolares, doble cara, doble personalidad, doble intención ¡¡y doble todo!! ... La otra opción, la de los que no se dejan, los que no quieren sentir esa noche oscura del alma, o depresión anímica, es drogarse como mejor pueden y saben, sea con drogas legales o ilegales, y así se evaden de sí mismos, pero pagando un precio muy alto, en su cuerpo y su mente, lo cual arrastrarán hasta que la Vida les dé otra oportunidad, cuando lleguen los tránsitos siguientes, que tal vez rechazarán también para el resto de sus vidas.

Conozco bastante bien esto de la noche oscura, por la teoría y por la práctica, muy dura la práctica, la teoría de Géminis y la práctica de Sagitario no siempre se unen, pues generalmente, para la mayoría de gente, lo que hacen es separarlas, mal asunto, muy mal asunto, porque la teoría sin la práctica no sirve para nada, es perder el tiempo, y porque seguimos viviendo el grave conflicto de la separación ... No quiero meterme donde no me llaman, pero yo te diría que estés con la consciencia despierta y no dormida, para recibir el contenido que migra de tu mente inconsciente, estás en un tiempo bastante GORDO, de disolución y purgación del ego, de perdonarte a ti mismo por los errores cometidos, o de recibir la gracia de Dios por los pecados, durante este tiempo de penitencia y expiación, es tu casa XII de Piscis, donde tienes Neptuno, del cual ya te he hablado en otras ocasiones, no es la primera vez y en esta ocasión son varios tránsitos que actúan sobre lo mismo.

Hay que salir del autoengaño, del engaño a los demás y del engaño de los demás, hay que salir de la negación de uno mismo y de la realidad de uno mismo, para que se unan las polaridades perdidas, para que se disuelva el ego cacaego, para que salgan afuera los venenos o toxinas que hemos guardado anteriormente, en la mente y en el cuerpo, y para que salgan también de nuestra vida las personas tóxicas y venenosas de siempre, son los enemigos ocultos, de antes y de ahora, y entonces descubrirás que tú eres y has sido tu único y mayor enemigo ... Y hay que dejarse llevar por algo que está por encima del ego humano, tus ángeles o tus guías espirituales internos, NUNCA EXTERNOS, y que actúa cuando le corresponde, cuando hay tránsitos astrales sobre tu Neptuno natal o sobre tu casa XII, y mientras que pasas un tiempo, más o menos largo o corto, de confusión mental y de crisis existencial.

Las cosas de tu vida no salen como tú quieres, no salen como tú pretendes, sino como la Mano Invisible de Neptuno/Poseidón, ha dispuesto en tu mente inconsciente, en los tiempos previstos, en el tiempo preciso y oportuno, cuando debe ser, cuando así lo determinen los tiempos del fatum ... Mientras tanto las cosas salen al revés de lo que tú esperas, porque así debe ser, para que tengas la oportunidad de reconciliarte, con algunas o con todas las polaridades perdidas, las que el ego no quiso asumir en tiempos pasados de tu vida, cuando vivías separado de ti, cuando eras 2 y no eras 1, cuando vivías en la dualidad o polaridad y no vivías en la unidad, cuando actuabas por miedo y no por amor a ti mismo, ... y precisamente para eso, para que te des cuenta de la poca o nula autoestima que tuviste, y le pongas remedio, anteponiendo el amor al miedo, antes de salir de este mundo traidor, de ilusión, fantasía y engaño ... Y olvídate de que alguien te haya echado un mal de ojo, el "mal de ojo" ya te lo echaste tú.

La casa XII es el Purgatorio cristiano, no es necesario esperar a la muerte física, es el convento donde monjas y frailes se aíslan del mundo de la materia y de los cacaegos humanos, en vida de meditación, contemplativa y de clausura, y esto sucede en todas las religiones, o bien en su propia casa también, lo cual es mucho mejor que un hospital o un psiquiátrico, aceptándola y esperando que pase la depresión, mientras que también se alternan periodos de éxtasis espiritual, días mejor y días peor, saltando de la depresión al éxtasis en un pis pas, y esperando el final del camino, el encuentro con uno mismo, o con partes perdidas de uno mismo, con el yo superior o con el yo verdadero, con Dios, o con el dios desconocido que todos guardamos adentro, y mientras tanto las polaridades escondidas en el Juego del Escondite de cada uno se unen, se sale de la dualidad y se encuentra la unidad ... Bien lo sabía Juan de la Cruz y Teresa de Jesús, ya lo decía ella: “Vivo sin vivir en mí, y de tal manera espero, que muero porque no muero”

Al borde de lo que parece un abismo, quien se adentra en la noche del espíritu se siente aislado, desechado, condenado. Desterrado ya del mundo exterior durante la noche oscura de los sentidos ahora está absolutamente solo en un amenazante mundo interior.

Quien se adentra en la noche del espíritu, se siente abandonado por sus amigos porque le han “fallado” y no le rescatan de las perspectivas de perdición; eso es esperar verdaderamente demasiado de sus amigos y, en consecuencia, está abocado a tal desengaño. Como el fronterizo, busca a los amigos, directores espirituales, esposa o compañera, confidentes u otros íntimos, como si fueran salvadores que pudieran realizar sobrehumanas hazañas. Esos amigos, empero, no son sobrehumanos, y así han de “fallarle” inevitablemente a quien ha tratado de hacer de ellos sus salvadores. Así, éste se siente “abandonado” al adentrarse en la noche del espíritu, abandonado por los amigos y abandonado a una perdición interior, atrapado entre dos mundos que le son ajenos: el exterior, sin vida, en el que “a nadie le preocupa realmente”, y el interior, un abismo aterrador. A veces, quien así está atrapado se siente como si saltara al abismo, como si estuviera suicidándose, precisamente porque “a nadie le preocupa realmente”.

Michael Washburn, (Psicología transpersonal). 
En una perspectiva psicoanalítica, página 242. Los libros de la liebre de marzo, S.L.

Saluditos desde mi soledad, pero ¡¡qué bien se siente uno consigo mismo!!, … y por lo tanto no estás solo, ahora estás contigo, porque, mal asunto, si para estar a bien con los demás, debes estar a mal contigo.

La oscura oscuridad del Bosque Oscuro
 

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