¿QUÉ ESTAMOS HACIENDO MAL? ...

Los hijos, los niños, el niño interior, el niño bueno y el niño malo

Los eclipses de Sol y de Luna en el signo de Leo o en la casa V

El eclipse total de Sol en Leo de agosto 2017
El eclipse penumbral de Luna en Leo de febrero 2017
El odio, el resentimiento, la destructividad y la venganza
El atentado terrorista en las Ramblas de Barcelona de día 17-08-2017

SÍMBOLO DEL SOL

 

¿QUÉ ESTAMOS HACIENDO MAL? ...

 

Muchos de nosotros habremos leído una carta, aparecida en la mayoría de periódicos de España, de una educadora social de Ripoll (Gerona), el lugar de donde provenían los terroristas que atentaron en las Ramblas de Barcelona, es una carta que reproduzco a continuación, y que me parece muy sentida, es para quien tenga interés en leerla y tal vez también quiera encontrar una respuesta a la pregunta que ella se hace: "Eran niños como todos, ¿qué es lo que estamos haciendo mal?" ... Muy buena pregunta, pero como yo digo, si el mundo es así desde hace miles de años, y hasta ahora no ha cambiado, quiere decir que lo estamos haciendo muy mal, y quiere decir que no podemos cambiarlo, o que no sabemos cambiarlo, o que no queremos cambiarlo, o tal vez y mucho mejor dicho, una mezcla de cada cosa.

¿Qué sucede, si estamos viviendo en el mundo del revés, en el mundo del engaño, en el mundo de la polaridad, en el mundo de la ilusión, en el mundo de Maya? ...

Todos somos libres de pensar a nuestra manera y cada cual lo hará a la suya, ... la mía es muy simple, "no hay nadie a quien cambiar, salvo a uno mismo" ... Queremos cambiar el mundo, queremos cambiar a los demás, ... queremos que sean a nuestra imagen y semejanza, igual que también hemos creado a Dios a nuestra imagen y semejanza, aunque también hay quien dice que Dios nos creó a su imagen y semejanza, y en fin, quien quiera puede reflexionar sobre las dos formas de verlo, y tal vez se dará cuenta de que quieren decir lo mismo.

No hemos venido a este mundo para ser "buenos" o para ser "malos", aunque hay un tiempo para cada cosa, y para mucha gente hay un tiempo para ser bueno y otro para ser malo, hemos venido para "ser", pero mientras tanto el niño bueno esconde al niño malo, y viceversa, porque estamos viviendo en el mundo de la polaridad, y hasta que se giran las polaridades, en el tiempo de los eclipses en Leo o en la casa V de cada individuo, tiempo en el cual el niño bueno y el niño malo se deben integrar y desaparecer, afrontando los miedos existenciales que en su infancia se ocultó a sí mismo, y los cuales le obligaron a ser "bueno" o "malo", pero que no le permitieron "ser".

No hay nadie a quien cambiar, salvo a uno mismo, y mientras tanto estaremos haciendo todo mal. Hay que salir del mundo del revés, del mundo del engaño, del mundo de la polaridad, del mundo de la ilusión, del mundo de Maya. Yo puedo entender que esta mujer se esté haciendo sus preguntas, igual que muchos, ella está pasando ahora su crisis existencial, igual que muchos, e igual que todos la pasamos en algún momento de la vida, y hasta que llega un momento en el que comenzamos a ver la Vida al revés de lo que nos han enseñado, ... no todos, solamente algunos, ... los que se atreven a buscar y encuentran, ... y así pues, igual que a mí, yo pienso que nuestros profesores, padres, curas, y otros más, nos han enseñado a vivir la Vida del revés, en el mundo del revés, en el mismo mundo que ellos la viven o la vivieron.

Símbolo de Leo

En estos días, de eclipse total de Sol en el signo de Leo, el día 21-08-2017, en el signo que rige a los niños, y al niño interior, al que todos llevamos dentro, sea el niño bueno o el niño malo, se produce una inversión de polaridades, igual que sucedió en el mes de febrero 2017, cuando hubo un eclipse de Luna en el signo de Leo ... Se dice que los atentados se habían comenzado a preparar hace 6 meses, y curiosamente hubo de coincidir con los eclipses anteriores, igual que ha coincidido con el atentado terrorista en las Ramblas de Barcelona, el jueves día 17-08-2017, a final del eclipse de Luna en Acuario y a 4 días del eclipse de Sol en Leo, el signo que rige al niño bueno y al niño malo, y el signo que rige el amor y el odio, entre otras cosas más, y muy especialmente la autoridad ... Todos sabemos que el atentado fue provocado por una docena de jovenzuelos niños, dirigidos por la falsa y nefasta autoridad de un fanático religioso.

Ya escribí suficiente sobre el Real Signo de Leo y la casa V, aunque se puede escribir todavía muchísimo más, no es necesario ser Leo, todos tenemos este arquetipo en nuestra personalidad, y así pues todos nos vemos afectados por él, en su polo positivo o en su polo negativo, y después es al revés, pero pocos saben estar en el centro, en el lugar donde no existen las polaridades, en el lugar donde desaparece "la sombra", en el lugar donde desaparece el mundo del revés, el mundo del engaño, el mundo de Maya. Es para todos, no solamente para los nacidos en el mes de Leo, y bueno, habrá mucha gente a quien nada le interesa la Astrología, pensando que es una superchería más, como muy bien hacen ver ciertos individuos, muy ignorantes, en los horóscopos de los periódicos y de la televisión, pues bien, a mí me importa poco lo que puedan pensar, cada uno es libre de creer o no creer, de ver o no querer ver, de buscar o de no querer buscar.

Para los interesados en saber qué sucedía astrológicamente, en esa tarde fatídica (de fatum/destino), diré que la Luna se encontraba en los últimos grados de Géminis (signo que rige la comunicación en todos sus niveles, incluidas las furgonetas y los paseos por algún lugar). Esta Luna actuó en oposición con Saturno en Sagitario (signo que rige el fanatismo religioso, filosófico y similares), y también hizo una cuadratura con Quirón en Piscis (el signo que rige los salvadores, víctimas y verdugos, o es decir, cientos de sanitarios, policías, taxistas, 15 muertos y 130 heridos, y una docena de terroristas) ... Todos sabemos que no es la primera vez que sucede en el mundo, ha sucedido en otras ocasiones, y la cuadratura entre Sagitario y Piscis de los últimos tiempos es la que lo determina, actuando la Luna como si fuera un "interruptor".

Si a lo anterior le añadimos, la cuadratura permanente desde hace meses, entre Júpiter en Libra y Plutón en Capricornio, la cual expande la destructividad que escondemos, en nuestra consciencia individual, pues ya tenemos un cóctel bastante completo. Destructividad, odio, resentimiento y deseos de venganza, que se deben aprender a transmutar, antes de proyectarlos contra los demás, y que realmente son contra cada uno de nosotros mismos, y por cada uno de nosotros mismos, si te atreves a descubrirlo. No son por causa de los demás y todo comienza por uno mismo, no debes pretender cambiar al otro, no tienes derecho a cambiar al otro, no podrás cambiar al otro, solamente podrás cambiarte a ti, si quieres, si te atreves, y tal vez ni tan siquiera eso, tal vez únicamente debes aprender a "ser", ni bueno ni malo, solamente "ser tú mismo", ser tu Yo verdadero y no un hipócrita con disfraz de niño bueno o de niño malo ... Mal asunto si te han educado para ser un niño "bueno".

¿Qué sucedería, si todos nos diéramos cuenta de que estamos viviendo en el mundo del revés, en el mundo del engaño, en el mundo de la polaridad, en el mundo de la ilusión, en el mundo de Maya? ... 

¿Qué sucedería si todos dejáramos de jugar en la primera parte del Juego del Escondite? ... No tendríamos más remedio que jugar en la segunda y tercera parte ... ¿verdad? ...

Reservados los derechos de autor. DF. Nomemientas Gavilán.

He aquí la carta de la educadora social, que trabajó con varios de los terroristas cuando eran niños, y lo mismo que aún seguían siendo, unos jovenzuelos que copiaron a los adultos.

"Quiero explicar cosas que no saldrán en los periódicos ni en la tele. Necesito gritarlo a los cuatro vientos, porque mi corazón está muy triste, mucho.

Nunca había tenido un sentimiento tan fuerte como este, porque no es racional, no viene de algo que ves que tiene que pasar o que forma parte de la vida. Viene de otro sitio que no soy capaz ni de describir.

Estos chicos eran niños como todos. Como mis hijos, eran niños de Ripoll. Como aquel que puedes ver jugar en la plaza, o el que carga una mochila enorme de libros, el que te saluda y te dejar pasar ante la cola del super, el que se pone nervioso cuando le sonríe una chica.

Me duelen las chispas que encienden el odio en las redes, en la calle, en el pueblo donde vivo, los periódicos...

Donde se muestra la ignorancia, el rencor, la indiferencia, el no respeto hacia el prójimo, los tópicos, las fronteras, el girar la cabeza hacia otro lado, el no saber ponerse en la piel del otro.

Y esto se repite siglo tras siglo, año tras año. ¿Qué es lo que estamos haciendo mal? Debemos parar esto. Debemos hacer algo. Y yo que creía que lo estaba haciendo bien, que había contribuido con mi granito de arena ....

Es cierto que nunca lo había vivido en primera persona y esto ha hecho que haya cambiado el punto de vista. Y además ahora lo veo desde el otro lado y estoy destrozada.

Las cosas que pasan en la tele o en la otra punta del mundo, son cosas que se acaban diluyendo y olvidando, y no se sabe lo que es cierto, o real. Y terminaba ganando la ira, la rabia e incluso acabamos aclamando «el ojo por ojo, diente por diente» para castigar estos actos.

Ahora tengo una sensación que se escapa ...

Me duele ver el mosaico de Miró manchado de sangre. Me duele ver que es en mi ciudad. Me duele pensar que podría haber conocidos y familiares en las Ramblas donde he dejado más de un par de suelas caminando por ella.

Me duele que hayan sido ellos...

No puedo contener las lágrimas. Es más, no he podido dejar de llorar desde el primer día y sé que nunca podré dejar de hacerlo. Estoy destrozada, rota por dentro.

Sé que estos días la balanza y el apoyo se decanta hacia las víctimas, hacia los hijos perdidos, las familias destrozadas, la ciudad de duelo.

Pero permitid que os cuente y os enseñe la otra cara de la moneda, la que no sale en los periódicos, la que no llora en público, la que en silencio se seca las lágrimas porque parece que está mal visto llorar por ellos.

Permitidme que os enseñe y os cuente cómo eran ellos, o al menos los niños que conocí yo. Mis pre-jóvenes del Lokal. Se me hace tan duro.

He trabajado casi toda mi vida, ahora ya tengo 41 años, en lo social, a pie de calle, en las trincheras como decimos nosotros. Nada más aterrizar en Ripoll, empecé a trabajar con un grupo jóvenes, pero había niños de casi todas las edades, unos cuidaban de los otros.

El más pequeño tenía unos 8 años y venía siempre de la mano de su hermano. Un hermano educado, tímido, amable, buen estudiante, tranquilo, que en la escuela nunca se metía en líos. Un niño que siempre me ofrecía bolsas de quicos o alguna golosina que se compraba con el poco dinero que tenía.

Había dos hermanos que siempre se peleaban. El mayor se ponía rojo cuando entraba aquella niña que le gustaba, aunque nunca le llegó a decirle nada. Nunca faltaba al local cuando estaba ella.
Al cabo de un tiempo llegaron más jóvenes del Nador, muchos aprendieron sus primeras palabras y por qué no decirlo: insultos entre golpes de ping pong. Yo también aprendí algunos en su lengua.

Y, cómo no, después venían los hermanos, las nuevas generaciones. Los traviesos, los de los ojos vivos y la sonrisa en la boca.

Todos íbamos creciendo y pasando etapas. ¡Anda que no sufrimos con la adolescencia, madre mía! Entre granos, espinillas, testosterona y sueños por cumplir. Todavía recuerdo las largas charlas en el despacho. "Raquel necesito hablar contigo"... y allí hacíamos nuestras tertulias y hablábamos del futuro.

Piloto, maestro, médico, colaborador de una ONG. ¿Cómo se ha podido esfumar esto? ¿Qué os ha pasado? ¿En qué momento...? ¡Qué estamos haciendo para que pasen estas cosas! Erais tan jóvenes, estabais tan llenos de vida, teníais todo una vida por delante... Y mil sueños por cumplir.

Ya no podré volver a decir qué guapos estáis o "¿ya tienes novia?" O "madre mía cómo has crecido". No podré ver a sus hijos como lo hago con los demás. No os podré abrazar ... Me duele tanto. No me lo puedo terminar de creer.

Esto no debe quedar como una historia más, tenemos que aprender, debemos hacer un mundo mejor. Practicando con el ejemplo, educando en la 'no violencia', transmitiendo el 'no odio' y la igualdad. Educando en las escuelas, en los espacios abiertos, en las familias, a nuestros hijos ...
Me quedan muchas cosas dentro y muchas instantáneas que nunca olvidaré.

Said, Moha, Moussa, Youssef, Omar... Younes... Y ahora Houssin... Es una pesadilla, la lista cada vez es más larga.

¿Cómo puede ser Younes...? Me tiemblan los dedos, no he visto a nadie tan responsable como tú...
Los actos que habéis cometido no tienen explicación y no son lícitos .. La guerra, la ira y el odio no llevan a ninguna parte. Nunca, en nombre de nada. Ni para nadie. Ni dioses, ni banderas, ni religión... Sólo puedo decir que tengo el corazón roto..."

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