MEDIACIÓN Y CONFLICTO FAMILIAR

Un palmito solitario, un superviviente en las montañas de Galatzó (Mallorca)

Debido a algo que se me ha preguntado, sobre las mediaciones que hacen los organismos públicos, en relación a los conflictos de tipo familiar, y antes de pasar por el Juzgado de Familia, más abajo transcribo lo que escribí en su día, y lo cual figura escrito en mi libro. Debo decir que fue un calvario más, lo que en principio parecía muy sencillo se complicó de una manera absurda, la Mano Invisible estaba dando vueltas con su tridente, con el tridente del dios Neptuno, con sus tres puntas dispuestas a pinchar a tres hermanos y al mismo tiempo. Las consecuencias de la mediación son muy largas de escribir y figuran en el mismo libro.

Debo decir que este paso me fue recomendado, antes de presentar una denuncia ante el Juzgado de Familia, y como último recurso para solucionar el conflicto con los hermanos, en relación al cuidado y atención de una persona dependiente, era mi madre y también la madre de ellos. En toda España, o eso pienso, existe o debería existir un organismo público que las lleve a cabo, normalmente existe una Consejería en cada Comunidad Autónoma, que se ocupa de ello, en mi caso fue la Dirección General de Menores y Familias, dependiente del Gobierno Autonómico Balear. Más abajo transcribo también el texto que detalla sus competencias. La mediación es siempre gratuíta, puede ser un paso adelante para evitar determinadas situaciones de conflictos familiares, y en este caso me refiero muy en concreto a los conflictos entre hermanos, para el debido cuidado y atención de la vejez de sus padres.

No quiero decir con eso que siempre se encuentre una salida, pero cuando la comunicación con los hermanos es imposible, pues siempre hay quien se quita las pulgas de encima, una mediación puede resultar positiva. Lo más importante es que la persona mediadora sepa estar realmente enmedio, pero sobre todo, que pueda entender lo que representa el cuidado de las personas ancianas, por parte de sus hijos, y que todos los hijos tienen la misma obligación, ni más ni menos, de atender a sus padres en la vejez, a partes iguales y no pretendiendo que uno solo se haga cargo de todo. En mi caso no fue nada fácil, además de que yo fui la primera persona que solicitó este tipo de mediación, para conflictos entre hermanos por el cuidado de sus padres, pues hasta el momento solamente estaba dirigida a matrimonios en crisis.

Tengo que decir que la atención recibida fue óptima, a pesar de que nuestro conflicto no estuviera incluido en sus competencias, sin embargo posteriormente se aceptó, aunque se necesitó de un tiempo que fue crucial y después no pudo ser concluida. Existen servicios de mediación en el ámbito privado, y básicamente dirigidos por psicólogos y mediadores profesionales, además de los Colegios de Abogados que también los atienden, lo cual y por supuesto no es en absoluto una garantía para que lleguen a un buen final. El buen final tan solo se puede obtener cuando hay buena voluntad de consenso, por parte de los hijos de la persona anciana y dependiente, y este consenso es muy difícil de lograr, ya que siempre los intereses personales suelen estar por encima de los intereses comunes, y en este caso me refiero de nuevo al "interés común", en atender a los padres comunes de los hijos.

En el tiempo de vida de mi madre yo hice lo imposible para que alguien mediara en nuestro conflicto, para que los otros dos hermanos se ocuparan también en su cuidado, y a partes iguales conmigo, pero nadie quiso hacerlo, nadie quiso mojarse, ni el psicólogo del Centro de Día, ni la trabajadora social del Centro de Salud, ni la trabajadora social de Asuntos Sociales, ni la Dirección General de Atención a la Dependencia, ni su médico de cabecera, ni su neurólogo, ni la familia, ¡¡nadie quiso mover un solo dedo!!, ... todos ellos me decían "que no estaba en sus competencias". Me quedé solo, solo para el cuidado de la madre común de tres hijos, como el palmito de la fotografía que ilustra el principio de la entrada.

 

30 abril 2009

182.- LA MEDIACIÓN ANTE LA DIRECCIÓN DE FAMILIA
 

Por fin he podido presentar ante la Dirección General de Menores y Familia, que depende de la Consejería de Presidencia del Gobierno Balear, una solicitud escrita y muy formal solicitando la mediación ante sus dos hijos, para que intenten hacer algo y que cuiden también de su madre. Ahora me toca esperar el trámite, que puede durar un par de semanas, y tal vez algo más … Ha transcurrido bastante tiempo desde que tuve la primera charla con ellos, han estudiado mi caso, y tienen intención de abrir la puerta para intentar una mediación … Es la última alternativa que me queda, y después de haberlo pedido a quien ha sido posible, pero si no se puede llegar a un acuerdo formal, serio y duradero en el tiempo, y que nunca sabemos cuántos años puedan ser, no tendré otro remedio que presentar una demanda en el Juzgado de Familia, no se me ocurre nada más para solucionar este asunto.

Entre sus competencias tienen un programa de mediación familiar, y después de la conversación que tuve con ellos hace unas 3 semanas, parece que pueden llevarla a cabo porque además ya me han dicho ¡¡que tienen un interés muy especial en mi caso!!, consideran que es un tema muy importante, aunque ya me dijeron, que también es el primer caso que tienen de este estilo, ya que básicamente dirigen su trabajo hacia matrimonios en crisis … Tengo una ilusión enorme con la persona experta en mediaciones que me ha estado atendiendo, y la considero una mujer que puede hacer entrar en razón, sensatez y responsabilidad a los 2 hermanos. La verdad es que ha sido muy atenta conmigo, y tanto ella como una compañera suya que también está al tanto de este asunto.

Hoy se cumplen las 40 lunas exactas, o 9 meses, desde que el 1º de agosto del año pasado se firmó el contrato con el Centro de Día, y cuando también fue aprobada la subvención del 60% de la Consejería de los Asuntos Sociales, un periodo de 9 meses entre la concepción y el parto. También nos coincidió con el mismo día que se producía un eclipse total de Sol, en el signo de Leo, y solo puedo entender ahora que, lo que comenzó en aquel momento, tenía también “una fecha de caducidad”. Cada vez me asombro más por este tipo de “coincidencias”, tanto casuales como causales, es exactamente lo mismo que ha sucedido con la Moza Boliviana, también ella ha estado aquí un periodo de 9 meses, esto me confirma de nuevo, que cada vez que suceden estas cosas, no tan solo le afecta a una persona, sino que también le sucede con otra al mismo tiempo, y siempre es con la persona que sirve de espejo.

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¿Qué es la mediación familiar?

Es un proceso de resolución de conflictos que complementa al procedimiento judicial, donde un tercer imparcial, el mediador o mediadora, trabaja para facilitar y conducir la comunicación con la finalidad de restablecer la capacidad negociadora de las personas en el conflicto. Son las mismas personas interesadas las que asumen su protagonismo y cooperación, en la búsqueda de los acuerdos que mejor se adapten a las nuevas necesidades, de todos los miembros del grupo familiar y en particular de los hijos.

¿A quién se dirige?

A parejas casadas o en convivencia que voluntariamente soliciten la intervención neutral, confidencial y cualificada de un mediador o mediadora: Decididas a separarse o divorciarse y no hayan iniciado el procedimiento judicial. En trámites de separación o divorcio. Separadas o divorciadas que deseen modificar las medidas del convenio. Este servicio tiene previsto hacerse extensivo a otros conflictos de índole familiar en años posteriores.

¿Qué ventajas ofrece para la familia?

Ofrece a los participantes la posibilidad de gestionar sus propios acuerdos. Minimiza los efectos negativos de la separación en los hijos. Permite el mantenimiento de la relación parental y la relación paterno-filiar de forma compartida. Favorece el aprendizaje de la negociación para resolver futuras decisiones sobre los hijos. Reduce los costes emocionales de toda la familia.

¿Quiénes realizan la mediación familiar?

Profesionales con formación universitaria, expertos en actuaciones psicosociales, familiares y jurídicas, con titulación específica en mediación. Además el programa cuenta con el apoyo de un equipo de profesionales de la Dirección General de Menores y Familia.

¿Cómo acceder al servicio?

Derivación interna desde la Dirección General de Menores y Familia. Derivados desde otras instituciones y servicios del ámbito familiar. Demanda directa.

Texto del libro "Tres hermanos y una madre" - Diario de un karma familiar (I) - El Juego del Escondite (la pérdida), inscrito en el registro de la Propiedad Intelectual (España), y protegido por derechos de autor. DF. Nomemientas Gavilán.

Puede interesarte leer: Karma y conflictos familiares  --  Los conflictos entre hermanos

Para conocer un libro escrito sobre esta problemática: Tres hermanos y una madre

Si te apetece leer algo más relacionado con la dependencia y la vejez, puedes pinchar en el siguiente enlace y encontrarás todas las entradas: enlaces directos

PÁGINAS DE INTERÉS PARA LAS ISLAS BALEARES

Ley 14/2010, de mediación familiar 
Dirección General de Menores y Familias
´Los casos de mediación familiar se han disparado para evitar pasar por un juzgado´
Más de 300 familias acudieron al servicio de mediación en 2014


PÁGINAS DE INTERÉS PARA EL RESTO DE ESPAÑA

Ministerio de Justicia
Unaf - Unión nacional de asociaciones familiares
Gobierno de Canarias
Comunidad de Madrid
Junta de Galicia
Gobierno de Aragón  
Junta de Castilla y León
Junta de Castilla-La Mancha
Junta de Extremadura
Gobierno de La Rioja
Junta de Andalucía
Región de Murcia
Gobierno del País Vasco
Gobierno de Navarra 
Generalidad de Cataluña
Gobierno del Principado de Asturias
Generalidad Valenciana
Gobierno de Cantabria