sábado, 23 de abril de 2016

ESTAR DE VUELTA/Bienvenido JUANMA

 "Cada mañana cuando me levanto miro hacia arriba
y doy gracias por ser parte de este mundo"  

"Para mí, lo anterior a la operación no existe. 
Me acuerdo de todo, pero mi vida empezó el día que desperté del coma".
  

En la tarde de ayer, casi a última hora, entré en la calle San Miguel, desde la Plaza de España, y justo frente a la antigua iglesia de Santa Catalina de Siena, encontré a un hombre sentado en una silla de ruedas y con una mesita frente a él, donde tenía unos libros a la venta, además de una serie de fotografías con el Papa Francisco, como se pueden ver en la foto de más arriba, una foto para la cual le pedí permiso y que él me dio. Me detuve a leer el texto que había escrito sobre un gran papel en el suelo y también a ver las fotografías, y al poco rato pude darme cuenta de que ya conocía su historia, por haberla leído hace un par de años en un periódico de Palma. Una de esas historias que te dejan un cierto recuerdo por lo inaudito de la misma, es una historia de haber quedado durante 20 meses en ese espacio que llamamos "coma", un espacio desconocido y temido entre la vida y la muerte.

El texto decía lo siguiente: 

Juan Manuel Oros Petro nació en Trenque Lauquen, provincia de Buenos Aires, Argentina, el día 30 de julio de 1977. Se graduó en Bachiller en Ciencias Sociales, en el Centro Polivalente de Arte, luego estudió informática. Se trasladó junto a su familia a España, allí ha comenzado a incursionar en el mundo de la escritura y se ha propuesto contar su historia, que no deja de ser impactante. No solo por los acontecimientos transcurridos en aquel momento sino, lo más llamativo es que lo cuenta estando presente, que después de veinte años, nos pueda ofrecer una lección de vida. Sin lugar a dudas, él volvió a nacer.

De inmediato me vino a la mente la muerte de mi madre, y el coma que ella tuvo que vivir y que yo también hube de padecer, pero en este caso ella no pudo regresar a esta vida, tuvo que marcharse definitivamente a la otra, en la espera de que pueda regresar algún día, y en la espera de que yo también la pueda encontrar cuando deje este mundo, o tal vez, quién sabe, si en un futuro tiempo de una reencarnación en la Tierra. Puedo decir que yo lo pasé muy mal, no así mi madre, quien estaba muy serena, en ese espacio desconocido para nosotros, en ese espacio entre acá y allá, fueron los 6 días más extraños de mi vida, y sobre todo la noche que ella se marchó definitivamente, fue cuando yo también estuve durante un larguísimo rato, en un espacio muy extraño, yo no estaba en este mundo, pero tampoco estaba en el otro, es algo que aún no he podido asimilar completamente.

Ayer yo esperaba una situación especial sobre las 19,54 h., era el momento exacto en que comenzaba mi revolución lunar, era el momento exacto en que mi Luna en Escorpio, la cual representa la muerte de mi madre, ya que la Luna es la madre y Escorpio es la muerte, se encontraba en el mismo lugar exactísimo del momento de mi nacimiento. Esto sucede cada 28 días, lo mismo que le sucede a todas las personas, siempre teniendo en cuenta el lugar donde está ubicada su Luna, por supuesto. Me di cuenta de esto después de haber hablado durante un rato con él y con su madre, quien estaba allí acompañando a su hijo. Nos despedimos cuando pasaban unos 10 minutos de las ocho de la tarde, las 20 h. Puede decirse que fue una "casualidad", pero también fue una "causalidad" enormísima.

Juan Manuel estaba sentado en su silla de ruedas, viendo pasar a la gente, y esperando que alguno se detuviera a comprarle su libro, "Estar de vuelta", sí, estar de retorno a la vida, después de 20 meses de estar en coma. El hombre tiene ahora 38 años, no puede hablar correctamente pero puede entender muy bien lo que se le dice, así que poquito pude hablar con él, fue más con su madre, una mujer que debe rondar los 65 años, muy bien llevados, y con el típico acento argentino, el cual no ha perdido, a pesar de los 20 años que lleva viviendo en España, en Palma de Mallorca, para ser más exactos. Una mujer que ha debido cuidar de su hijo desde que a los 15 años de edad tuvo un grave accidente de moto y después le encontraron un tumor en el cerebelo.

Cualquiera puede imaginarse que no es nada fácil, en absoluto, solucionar un problema así, y mucho más difícil es regresar a la vida después de casi dos años de estar en coma, debido a la problemática que se originó tras ser operado de ese tumor. El mundo está lleno de situaciones difíciles, situaciones que el ser humano, con su limitada capacidad, es incapaz de resolver, por muchos médicos y hospitales que haya. Me llama mucho la atención su persona, el haber querido regresar a la vida, el haber seguido en la espera del momento en que debía regresar aquí, mientras que su madre y su familia han estado con él en todo momento, esto me contó su madre. Él ha tenido la gran suerte de tener a su lado a su familia, esto no sucede siempre, y lo digo por experiencia propia. 

En el siguiente enlace hay un artículo en el diario El Mundo, que habla con más detalle de una parte de su historia: Mi vida comenzó el día en que desperté del coma, y por supuesto y con mucho más detalle lo describe en el libro que él mismo ha escrito, usando su propio ordenador pero no con todos los dedos, como me contaba su madre, él no tiene facilidad para hacerlo como lo puedo estar haciendo yo en este momento. Tiene también su propio blog en Internet, estar de vuelta, y lo mismo que tiene su perfil en Facebook. Una gran lección la que nos puede dar Juanma, una gran lección de supervivencia, una gran lección de querer seguir viviendo, a pesar de los pesares, teniendo en cuenta lo difícil que resulta a veces continuar haciéndolo.

Yo he querido dibujar su carta astral de nacimiento, le pregunté la hora a su madre y muy rápidamente me la dio, está claro que nadie mejor que ella para saberlo, así que anoche la dibujé y hubo algo que me llamó muchísimo la atención. No voy a entrar en detalles que pueden ser personales y de los cuales yo no he pedido ninguna autorización para hacerlo, así que solamente diré que él nació con el Sol en el signo de Leo, en el signo del león, en el signo de la Fuerza, y ubicado en su casa VIII, "la casa de la muerte y de la resurrección", la casa de la transmutación, la casa del Ave Fénix que renace de sus cenizas, la casa que a todos nos inspira cierto miedo, no a mí, o eso creo, pues yo también pasé por algo similar a él, en el momento de mi nacimiento, y lo mismo que él lo pasó también en el momento de su nacimiento.

Con esto quiero decir, que todos tenemos nuestro propio instinto de supervivencia, nunca nos abandona, pero a veces algunos abandonan este instinto y prefieren salir de este mundo, posiblemente también es debido a que ha llegado el momento, yo no lo dudo. Yo sé que la vida de cada persona está escrita en el tiempo, lo sé muy bien, pero aún tengo una pregunta a la cual no le puedo encontrar la respuesta final: ¿hasta dónde podemos hacer para modificar el destino?, ... Yo sé que entre Juanma y su madre existe un karma muy especial, no voy a describirlo por ser algo de su intimidad personal, pero también sé muy bien que ella está pagando un precio muy alto por su hijo, lo mismo que también yo he pagado un precio muy alto por mi madre, que en paz descanse.

Desde aquí dedico esta entrada de mi blog a Juan Manuel, en el Día del Libro, y por varias razones, una de ellas es porque también es Leo como yo, tal vez por esto y por haber leído su carta astral, puedo comprenderle bastante bien. La otra razón, y la más importante, es que realmente nos ha dado una lección de supervivencia, una lección de querer seguir viviendo, para así cumplir con el destino que él se había propuesto, no tuvo miedo de regresar a la vida y esto es algo que yo valoro mucho, teniendo en cuenta que mucha gente tiene miedo de vivir y teniendo en cuenta que mucha gente decide dejar de vivir. Desde aquí le mando mi bienvenida a la vida y desde aquí le deseo lo mejor del mundo, tanto para él como para su madre, quien le acompaña en todo momento, porque ella también es una gran madre, lo mismo que yo fui un gran hijo para mi madre.
 

Nacemos para vivir, 
por eso el capital más importante que tenemos es el tiempo, 
es tan corto nuestro paso por este planeta,
 que es una pésima idea no gozar cada paso y cada instante,
con el favor de una mente que no tiene limites,
y un corazón que puede amar mucho más de lo que suponemos.

Facundo Cabral (cantautor y poeta argentino).

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15 comentarios:

Unknown dijo...

Juanma querido... posiblemente a estas alturas ,te darás cuenta que la pregunta no es"... por que a mí?"; la pregunta siempre ha sido: "...para que a mí?".... te diste cuenta? y no es un acertijo, creo que ahora que estudio física cuántica a partir de un postgrado en BIONEUROEMOCIÖN ( oh "casualidad" virtual con España en el ECI)pueda ver tan clara esta respuesta trascendental; ..es para que vivieras doblemente Juanma, para que tu vida sea un ejemplo de superación, de Valentía, de hacer saber al mundo que las cosas se pueden transformar y verlas desde otro lado; con otra mirada... vos fuiste "elegido" para comunicar amor con tu historia de vida. Tu vida es superadora en un acto de amor y Valentía. Te quiero mi Valiente... te Abrazo con el Alma... Susana.

Juanca dijo...

Muy interesante la historia que nos cuentas, y muy interesante debe ser también este libro, igual que lo es el tuyo. La gente debería leer estas historias reales y no tantas historias ficticias, inventadas por individuos que no han vivido en carnes propias la muerte y el dolor de la vida y que solamente buscan el beneficio económico. Saludos para ti y también para Juanma, los dos habéis sido unos valientes.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Muy buena observación, la pregunta más correcta es ¿para qué?, pero generalmente nos preguntamos ¿por qué?... Con el por qué esperamos una respuesta rápida para una fácil comprensión, con el para qué necesitamos de un tiempo más o menos largo, para poder comprender y asimilar lo que nos ha sucedido. Largo trabajo el descubrimiento del para qué, pero es el más válido y valioso, para poder transmutar la causa original que ha provocado tal efecto. Gracias por comentar. Un saludo para ti y otro de parte de Juanma, estoy seguro de que él me lo diría así.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Gracias por lo que dices, tú también estás siendo un valiente, ésta es la fuerza y el gran amor de los Leo, hacia los demás, pero nunca hay que olvidar que también se debe dar a uno mismo. Yo también entiendo que solamente a través de experiencias reales se puede transmitir un mensaje completo, pues con las inventadas no puede existir. Un abrazo para ti y no te desmorones, por favor.

María Luisa dijo...

Yo también pienso lo mismo. La gente en general prefiere pensar que estas cosas tan graves son ficticias, tanto las que ha escrito usted en su blog y como este relato, la gente prefiere leer novelas y así se engañan un poco más, pensando que nunca les puede suceder a ellos, y pensando que solamente se ve en las películas. Somos así, no sabemos cómo hacer para ver la vida en su realidad más dura, pues esto es la vida, tierna y dura, dulce y amarga. Enhorabuena por el blog, me parece de lo más intesante.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Gracias a usted por leerlo y comentar, yo también lo comparto. Un saludo.

Anónimo dijo...

Suscribo tambièn yo el comentario de Juanca,deberìamos leer màs las historias reales , aquellas con las cuales nos identificamos, me parece ademàs muy generoso de tu parte comentar esta historia.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Pues sí, pero no sucede así, por desgracia la gente prefiere pensar que las historias reales y penosas no existen, al menos las vivencias dolorosas, pero eso sí, pienso que les gusta leer las vidas de los famosos, de los que se ganan los millones a espuertas, esto nos gusta generalmente a todos. Yo pienso que no nos gusta leer vivencias personales dolorosas, porque nos recuerdan y nos reavivan el dolor propio que llevamos dentro, así lo ignoramos mejor, pero la gente no se da cuenta de que hay que despertar el dolor propio, aunque sea a través del dolor ajeno, para de esta manera poder transmutarlo, prefieren que siga enterrado, por lo menos una gran mayoría, no todos por supuesto. Gracias por leerme y comentar.

Anónimo dijo...

Sólo unas palabras para reivindicar todo tipo de libros. Pienso que todas las lecturas son válidas. Todos los estilos literarios tienen parte de la realidad del autor que nos quiere transmitir, en ocasiones transcrita literalmente y en otras a través de una historia ficticia. Os aseguro que el dolor y el placer se puede despertar en cualquier momento, con cualquier estímulo...incluso con una lectura de ficción, depende entre otras cosas de la sensibilidad del lector.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

También es cierto lo que dices, la sensibilidad del lector, en el momento que lo lee, es lo verdaderamente importante, cuando el momento de la lectura coincide con el momento correcto, escrito en el tiempo, del despertar de alguna emoción perdida en el inconsciente personal. Gracias por el comentario, aunque yo siempre valoro mucho más las historias reales que no contienen elementos ficticios.

Maria Luisa dijo...

Otra vez estoy aquí. Muy cierto lo que dices, fuiste un gran hijo para tu madre, lo que no fueron tus hermanos, si es que alguna vez lo fueron tuyos e hijos de tu madre. Un abrazo.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Te agradezco lo que dices, me lo ha dicho bastante gente, sus amigas y cuidadoras del Centro de Día, su médico, la trabajadora social, la inspectora de Asuntos Sociales, sus vecinos del barrio y algunos del mío, pero nadie de la familia lo ha dicho, algunos lo vieron, pero ya sabes el karma familiar que cargamos. Ninguno ayudó a mi madre y menos a mí, así es la vida, la vergüenza puede más, y si alabaran lo que yo hice, se darían cuenta de lo que ellos no hicieron, por esto no lo dirán nunca, ¿lo entiendes?. Hasta la vista.

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Hoy me he encontrado con Juanma en el mismo lugar, ya tiene su libro editado en inglés y hay turistas que se lo compran, por allí se pasean a miles. Me ha contado que se mueve con su silla eléctrica por donde quiere, y que está aprendiendo mecanografía, y así que muy pronto hará 1.000 ó 2.000, o quizás 3.000 pulsaciones por minuto. Un saludo para él si lee esto.

Anónimo dijo...

Muchas gracias por el artículo, al igual que las personas que lo han leído me he emocionado. El estar vendiendo mi libro en la calle me llenna y me ha dado la oportunidad de conocer a muchas personas con las cuales me sentaría a tomar un café. Porque son personas que al igual que yo, tienen algo que contar. Saludos y mil gracias Juanma

DF. Nomemientas Gavilán dijo...

Otra vez no sé qué ha pasado, ya sucedió en otra ocasión. Me ha llegado un comentario, a través del correo de blogger, pero no aparece en esta página, así que lo transcribo aquí:

Anónimo ha dejado un nuevo comentario en su entrada "ESTAR DE VUELTA, BIENVENIDO JUANMA":

Muchas gracias por el artículo, al igual que las personas que lo han leído me he emocionado. El estar vendiendo mi libro en la calle me llenna y me ha dado la oportunidad de conocer a muchas personas con las cuales me sentaría a tomar un café. Porque son personas que al igual que yo, tienen algo que contar. Saludos y mil gracias Juanma

Publicado por Anónimo para Tres hermanos y una madre - Diario de un karma familiar (I) El Juego del Escondite (la pérdida) a las 21 de julio de 2016, 17:55

Te agradezco Juanma tus noticias, ya veo que debes andar por las 2.000 pulsaciones por minuto, me alegra mucho que así sea, asi son los luchadores valientes, así son los Leos valientes, los que nunca se hunden ante las adversidades de la vida, tal como has hecho tú, y como deberiamos hacer todos en las situaciones más difíciles de la vida.
Cuídate y ámate siempre, ya falta menos para tu próximo cumpleaños. Un abrazo para ti.