lunes, 10 de febrero de 2020

EL SILENCIO DE 3 ALMAS ERRANTES

Pues sí, eso somos, 
almas errantes, 
no sabemos quiénes somos, 
no sabemos a dónde vamos, 
y mucho menos sabemos de dónde venimos.
En nuestra mente consciente sabemos una parte,
en nuestra mente inconsciente sabemos el resto.
Todo es y no es al mismo tiempo.
Todas las verdades solo son medias verdades.
 

Silencio de Beethoven
(recomendado escuchar para relajarse un poco)

-dedicado a las 3 almas, aunque no sepan quienes son, a vos, a vos y a vos-

Todo se hunde en la niebla del olvido,
pero, cuando la niebla se despeja,
el olvido está lleno de memoria.
(Mario Benedetti)

EL SILENCIO DE 3 ALMAS ERRANTES

Y bueno, generalmente nadie sabe de dónde viene ni a dónde va, ... algunos saben algo y otros nada saben ... Yo conozco un caso de 3 almas errantes, son 3 almas que se encontraron en el siglo XVI, que dejaron entonces pendiente un karma muy serio, lo sepultaron en el silencio y en el olvido, y quienes se volvieron a encontrar en esta vida actual, en el siglo XX, y ahora también en el XXI, en España ... La Vida no se olvidó de su olvido y lo preparó todo y ellas también lo prepararon antes de nacer ... Es un ejemplo de almas errantes, las cuales se van buscando y las cuales se van encontrando, a lo largo de la eternidad de los tiempos, para resolver el karma que dejaron pendiente, para despejar la niebla del olvido, y para que el olvido se llene de memoria ... La Vida nunca nos perdona, aunque parezca que lo hace, y no, no lo hace, ni Dios tampoco, ... lo que hace es dejarlo pendiente, para un futuro en el cual cada una de las almas esté preparada, y ya entonces se atreva a enfrentarse con el silencio y con el olvido, y así entonces cobrar y pagar, con mucho Amor, lo que dejó pendiente.

El alma del hombre es como el agua,
viene del cielo,
se eleva hacia el cielo,
y vuelve después a la tierra,
en un eterno ciclo.
(J.W. Goethe)

En este caso se trata de 3 almas errantes, que vivieron en una ciudad de Argentina, en Mendoza, en el siglo XVI, en una ciudad que se fundó por los españoles en ese mismo siglo, y donde vivieron una historia que nunca quedó resuelta entre ellas, una historia de amor, de Amor Incondicional y de amor prostituido, de amores y de adulterios, de odio y de resentimiento, de abandono y de perdón, de sexo y de castración, de fidelidad y de infidelidad, de encuentros y de desencuentros, de verdades y de mentiras, de despistes y de olvidos ... Un triángulo amoroso en el cual se vieron inmersas y el cual no fue perdonado ni penitenciado por ninguna de estas 3 almas ... Una de ellas, el alma perjudicada, perdonó a su adultero consorte, pero solamente fue de palabra, el Amor Incondicional pudo más, pero que no fue perdonado en el sentimiento, porque no supo hacerlo y porque el dolor era inmenso, de manera que todo se quedó guardado en el silencio y en el olvido, ... en lo más profundo de su inconsciente personal.

Las otras dos almas adulteras tampoco se perdonaron a sí mismas, y ni pidieron perdón ni sufrieron la penitencia que les correspondía cumplir, no hubo ocasión de hacerlo y se quedó pendiente, se hundió en la memoria del olvido, y todo quedó sumido en el silencio ... Y así que ahora se encuentran con la experiencia de antes, la cual es la misma de ahora, que debe ser procesada, sanada y perdonada, para toda la eternidad de los tiempos ... El problema es que tan solo una de estas 3 almas conoce la historia y una parte de sus detalles, las otras dos almas la ignoran, porque está profundamente escondida en su inconsciente, y como sucede siempre, ahora ya ha llegado otra vez el tiempo oportuno, para esto, para procesar y para perdonarse a uno mismo y al otro, ... por lo mal hecho en otra vida, por aquello que se quedó hundido en la niebla del olvido ... Yo me puedo imaginar que no se trata de la única vez que se han encontrado, y pues entiendo que en cuatro siglos han vivido también otras oportunidades, que se mantuvieron en el silencio y en la niebla del olvido, las cuales y por supuesto no se supieron o no se quisieron aprovechar.

Lo más fácil es ignorar que tienes pendiente de resolver algo con otro, ignorar que has hecho daño a alguien y debes pagar por ello, el precio que te corresponde, pero mientras tanto se sigue guardando el recuerdo en lo mas profundo de la psique, en la niebla del olvido, muy profundo, muchísimo, en el laberinto de las neuronas del cerebro, porque, y cada vez que intenta "resucitar", lo que hacemos es añadirle una losa más, para sepultarlo aún más, para así no verlo, ni recordarlo, ni sentirlo, ni vivirlo, ni pagarlo, ni perdonarlo ... No es fácil vivir el perdón, a uno mismo y al otro, no es fácil transmutar el amor prostituido en Amor Incondicional, no es en absoluto fácil, nos crea un conflicto del copón, y porque el ego debe arrodillarse ante el silencio y ante el olvido, para que la niebla se despeje y el olvido se llene de memoria, y para que las lágrimas de los ojos broten con Alegría y con Amor, ... y hay quien esto no lo puede soportar.

Nos elevamos, arrodillándonos,
conquistamos, entregándonos,
ganamos, renunciando.

Nacemos a este mundo con una memoria inconsciente, es la memoria del olvido, no la conocemos, de aquellas experiencias que vivimos en una vida anterior y que algún día deberemos revivir, cuando llegue el momento oportuno, cuando llegue el momento en el cual se debe abrir esa memoria pasada, el momento en el cual la losa se debe levantar, y para esto está Plutón/Hades, para desenterrar aquello que toca por tránsito, cuando corresponde hacerlo, bien aliado con Saturno/Cronos, el dios del tiempo y del reloj, y ahí tenemos la oportunidad de abrir, o cerrar de nuevo ... Mal asunto si lo cerramos otra vez, la Vida no perdona y mientras no resuelvas lo pendiente no podrás ser feliz ... No te quedará más remedio que morir y volver a nacer en el futuro, para, ya por fin, si un alma se atreve y las otras también, pueda ser despejada la niebla y el olvido llenarse de memoria, para que pueda ser perdonada y transmutada la experiencia, con mucho Amor, la de antes y la de ahora, la bloqueada en el silencio y en el olvido de una vida anterior, y con toda certeza también, por repetición, en algún momento anterior de esta vida actual.

Hay un tiempo para cada cosa y una cosa para cada tiempo,
hay un tiempo para el olvido y un tiempo para el recuerdo,
hay un tiempo para enterrar y otro tiempo para desenterrar.

Mal asunto, si un alma quiere y las otras no quieren, o no saben o prefieren ignorarlo, como es el caso de estas 3 almas errantes, pero, si una quiere y las otras no quieren hacerlo, pues no hay ningún problema, ¡¡¡¡ponte siempre en tu lugar, permanece en el silencio, empuja tú con mucho amor la losa, sin miedo a las consecuencias, entonces la niebla se despejará y el olvido se llenará de memoria, y las otras almas también se verán obligadas a levantar sus losas!!!! ... Otra cosa es el procesamiento de la información, la que guardó el cerebro, durante los tiempos del olvido, y además de la vivencia emocional, que puede necesitar de más o menos tiempo, y depende, como todo, todo depende de la magnitud y de cuan profundo lo hayamos guardado, todo depende de la cantidad de olvido que la niebla ocultó a la memoria.

Reservados los derechos de autor: D.F. Nomemientas Gavilan.

ALEA JACTA EST

Una prueba fehaciente, de que los hombres conocen la mayoría de las cosas antes de nacer, es el hecho de que, cuando son simples niños, llegan a entender innumerables fenómenos, con tal rapidez, que es evidente que no los están comprendiendo por primera vez, sino que los recuerdan, los traen a la memoria.

Cicerón (jurista, filósofo, escritor y orador romano del siglo I a.C.)

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Reloj de Sol que marca los tiempos de Cronos

"No creas en cualquier cosa porque te enseñen el testimonio escrito de un viejo sabio. 
No creas en cualquier cosa porque provenga de la autoridad de maestros y sacerdotes. 
Cualquier cosa que esté de acuerdo con tus propias experiencias, 
y que después de una ardua investigación se manifieste de acuerdo con tu razón, 
y conduzca a tu propio bien y al de todas las cosas vivientes, 
acéptala como la verdad y vive de acuerdo a ello"
 (Buda)